Palabras, Palabras, Antoni Muntadas
Daniel Fernández Cañadas
Galería Moisés Pérez de Albéniz (del 21 enero al 18 de
marzo de 2017)
Inés Flórez Lancha
“Palabras,
Palabras” de Antoni Muntadas reflexiona sobre la dicotomía entre lenguaje y
política. A través de diferentes medios, las obras hablan de la actualidad del
ámbito español y del internacional. Ideas como “demagogia”, “debate”,
“democracia”, “gobierno” o “ideología” inundan las salas de la exposición y
elaboran un discurso que trata de los sistemas de poder en una sociedad
dirigida por los mass media.
Como
dice el artista, en esta exposición “las palabras se transforman en
imágenes” y lo hacen desde la entrada a la galería, con una fachada que ya
anuncia el carácter de la muestra. Tanto las fotografías de
Estados Unidos, como las impresiones digitales que cuelgan de las paredes, y la
instalación “The Press Conference Room”, ahondan sobre el lenguaje “público” y
su repercusión y controversia. Esto recuerda a otras obras anteriores del
artista donde a través de los diferentes medios, se cuestiona sobre temas como
este. Los “artefactos”, como así llamó el artista, que requieren ser activados
y que adquieren distintas significaciones según el contexto en el que se
encuentran, hallan aquí una continuidad con las obras de la galería Moisés
Pérez de Albéniz.
La
exposición es una llamada de atención ante los casos de corrupción, injusticias
y ante el poder de unos pocos que acaban siendo odiados por la mayoría. Siendo
un objetivo ambicioso, considero que la forma de abordarlo no lleva a ningún
puerto, ya que parece, una vez más, criticar sin remediar. Por su parte, cabe
destacar la fuerza visual de las obras, como los carteles de la segunda sala
que llenan el espacio de conceptos tan utilizados como a veces vacíos, ideas
que forman parte de la contemporaneidad y que acaban en boca de todos. Por otro
lado, la instalación resulta tanto atractiva como directa ya sea por el río de
periódicos y las noticias que contienen, como por el atril donde se simula un
discurso político.
Sin
embargo, y a pesar de lo ingenioso de la producción, el tema es tan repetitivo
como aburrido. Bombardeados por la información de los medios y las opiniones de
uno u otro partido político, entrar en una exposición donde Trump, Rajoy, el
PSOE, Cifuentes, Pujol y tantos otros son los protagonistas, resulta
desalentador y tedioso. Siendo consciente del mensaje subyacente a las obras y
de la importancia que puede tener reflexionar sobre el lenguaje empleado por
los medios y los políticos, creo que esta exposición no tiene nada de novedoso,
recayendo sobre un tema del que es fácil crear controversia, solo hace falta
vivir en el mundo para ser consciente de ello. Si bien es cierto que el siglo
XXI es un espacio de desigualdades, de opiniones opuestas, de lucha de
libertades, de abanderar los propios derechos y de cuestionarse sobre lo que
ocurre en la sociedad en la uno vive, también es un espacio donde la política
inunda otros ámbitos, y donde uno sale casi desorientado y hastiado de tanto
pesimismo y tanta crítica a los sistemas sin llegar a ninguna solución.
Considero
que las obras por sí mismas tienen fuerza visual, y que el fundamento de las
mismas no está mal encaminado, como ya ha demostrado Antoni Muntadas con obras
anteriores. Pero concluyo, reiterando que el pesimismo sin activismo no llega a
ninguna parte, y uno sale de la exposición tan abatido como enfadado, pero sin
haber visto ninguna luz a tanto desorden. “Palabras, palabras” es una exposición
más donde el arte y la política van de la mano, pero en este caso las ideas se
quedan más como castillos en el aire que como conclusiones reales.
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